Un señor espera nervioso durante el parto de su esposa. Pasadas varias horas aparece por la Sala de Espera un médico y le dice:
- ¡Enhorabuena! He tenido usted seis hijos preciosos.
- ¿Seis hijos? -dice asustado el hombre-. Madre mía...
- ¡Ánimo! Están todos sanísimos -replica el doctor intentando quitar hierro al asunto.
- Bueno -responde el recién padre en un arrebato de chulería-, tampoco se podía esperar otra cosa porque a fin de cuentas tengo yo ahí abajo un pedazo cañón...
- Pues a ver si se lo limpia -sentencia el médico- porque le han salido todos negros.
- ¡Enhorabuena! He tenido usted seis hijos preciosos.
- ¿Seis hijos? -dice asustado el hombre-. Madre mía...
- ¡Ánimo! Están todos sanísimos -replica el doctor intentando quitar hierro al asunto.
- Bueno -responde el recién padre en un arrebato de chulería-, tampoco se podía esperar otra cosa porque a fin de cuentas tengo yo ahí abajo un pedazo cañón...
- Pues a ver si se lo limpia -sentencia el médico- porque le han salido todos negros.
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